top of page

UN MAESTRO ÚNICO

Hoy se cumplen seis años del comienzo del viaje de José Manuel Briceño Guerrero hacia mundos siderales. Ya desde pequeño los imaginaba muy bien, por eso no le hizo falta hablar hasta los cinco años de edad, según contaba Doña Aurora.


Hoy solo quiero recalcar algunas características del Maestro para alguien que me preguntó ¿Quién era José Manuel Briceño Guerrero? 


Le contesto lo siguiente:


Hubiera podido hablar del filólogo, del hablante de 15 lenguas, del filósofo, del poeta, del escritor de ficciones o del padre que era. Sin embargo, lo que quisiera decir de él es:

- Sabía relacionar temas muy distintos.

-  Sabía escuchar a los demás.

-  Sabía comprender a los demás.

- Sabía utilizar de manera imprevisible la poderosa palanca del humor para transmitir su enseñanza. Le gustaba divertirse en sus seminarios. Él decía que era su lado indígena. 

- Sabía contar con entusiasmo. Los cuentos más banales y verosímiles en general eran falsos, inventados y los cuentos más descabellados, estrambóticos, inverosímiles, siempre habían realmente ocurrido.

-  También utilizaba como método "la mamadera de gallo". Se dice en Venezuela de una manera de molestar al otro con ironía; sarcasmos y burlas, hasta llevarlo a enojarse. Esto obligaba a sus discípulos a sobrepasar el ego o a tomar consciencia de ello y a poner en tela de juicio sus propias creencias.

- Había conocido el hambre en su niñez y juventud, entonces le gustaba mucho comer. Eso sí, en compañía, compartiendo. "Si no va a comer no me mire, no me vele la comida".  No le gustaba que se desperdiciara ni siquiera un granito de arroz. 

Cuando lo homenajeaban con placas él decía: ¿Por qué no una cenita, un lechoncito... en vez de esa placa?

- Lograba reunir personas sumamente distintas, logrando que se aceptaran y se entendieran, por lo menos delante de él. Algunos comprendieron esa enseñanza, otros no. 

- Le gustaba mucho reírse a carcajadas, que le echaran chistes, pero detrás de su risa un buen observador podía sentir una forma de tristeza.

En varios sitios de Venezuela habrá hoy homenajes, a veces incluyendo noches largas, pero, ¿Cuántos recuerdan sus consejos?



José Manuel Briceño Guerrero 

Photografía de José Gregorio Vásquez


bottom of page